13 de julio de 2011

No pretendo que me regales una historia de amor, ni si quiera un verano inolvidable, bueno quizá esto último si. Quiero divertirme en tus brazos, devorar tus labios, tocarte, sentirte, quiero que lo pasemos bien, quiero, por lo menos, ser un error en tu vida, que me recuerdes, y digas..
¿cómo pude ser tan tonto?
mientras vuelve mi imagen a tu cabeza y aparece en tu boca una irrebocable sonrisa.